La sociedad española en general está aplaudiendo la nueva medida que conlleva un nuevo abono único de transporte, anunciado por Pedro Sánchez el pasado lunes 15 de diciembre. Este abono es de carácter mensual y costará 60 euros, aunque los menores de 26 años pagarán 30 euros. Este abono permite utilizar cualquier tren de Cercanías o de media distancia. Sin embargo, no afecta a las largas distancias.
Esto ha sido comentado por el director de Terminus Centro de Estudios del Transporte, Joan Carles Salmeron, quien asegura que esto es un problema.
“La diferencia con Alemania es que España ha concentrado en los últimos 25 años de manera errónea casi todas las inversiones a la alta velocidad. Hoy podemos decir que entre las principales ciudades no tenemos un transporte de segunda”, señala.
El problema es que la alta velocidad en España sigue siendo un tipo de transporte reciente, y costaría demasiado coordinar a todas las operadoras para que exista un billete de transporte único.
Aunque el especialista aplaude la medida, lamenta que no afecte a la larga distancia, siendo un problema que se sigue arrastrando en el país desde hace años.
Sin embargo, no son pocos los que piden que el transporte público en España sea gratuito. Salmeron también ha hablado de ello y asegura que está a favor de su no-gratuitidad, ya que “está demostrado que no es conveniente ni positivo”, asegura el experto.
